La sonrisa es una expresión universal de felicidad y confianza, y los dientes desempeñan un papel fundamental en la forma en que percibimos nuestra propia imagen y cómo nos presentamos ante el mundo.
Sin embargo, factores como el desgaste, la pérdida de dientes, la malposición y otros problemas dentales pueden afectar no solo nuestra estética, sino también la función oral y salud en general.
En este sentido, la rehabilitación oral emerge como una especialidad odontológica que no solo busca restaurar la salud bucal, sino también mejorar la apariencia facial y la calidad de vida de los pacientes. Aquí vamos a revisar detalladamente en qué consiste, cuáles son sus objetivos, los problemas que puede abordar y los tipos de procedimientos que existen.
La rehabilitación oral es una disciplina odontológica integral que combina una variedad de tratamientos y procedimientos con el objetivo de restaurar la función, la estética y la salud oral de los pacientes.
A través de enfoques personalizados, esta especialidad busca solucionar alteraciones dentales complejas y darle una apariencia óptima a la estética de la sonrisa. Es una especialidad que no solo se centra en abordar los problemas individuales, sino que también considera la interacción de todos los elementos de la boca para lograr un resultado armónico y funcional.
Las personas que deseen o requieran un tratamiento de rehabilitación oral, es porque presentan diferentes necesidades que esta especialidad puede encargarse de resolver. A continuación, vamos a revisar cuáles son los principales objetivos de esta especialidad:
La rehabilitación dental es un enfoque integral que se encarga de abordar una amplia gama de problemas dentales y bucales para mejorar la salud y darle una nueva apariencia a la sonrisa. Vamos a verlos a continuación:
Por un lado, la malposición dental hace referencia a la condición en la que uno o varios dientes no están ubicados en su posición adecuada en la boca. Esto puede manifestarse en diversas formas, como dientes que están torcidos, girados, inclinados o desplazados fuera de su posición normal.
Puede ser hereditaria o desarrollarse con el tiempo debido a factores como la carencia de espacio en la boca, la pérdida prematura de dientes de leche o la presión ejercida por hábitos orales. Generalmente, ocasiona implicaciones estéticas debido a que los dientes desalineados pueden afectar la apariencia de la sonrisa y la autoestima del paciente. De igual forma, en un sentido funcional, pues dificulta la masticación, el habla y el cuidado adecuado de los dientes y las encías.
En cuanto al apiñamiento, es una forma específica de malposición dental en la que los dientes no tienen suficiente espacio en la boca para acomodarse de manera correcta. Como resultado, pueden superponerse, girarse o desplazarse en posiciones incómodas debido a la falta de espacio. Es más común en la región anterior de la boca, donde los dientes frontales están más visibles y afectan la apariencia.
El desgaste dental, también conocido como abrasión dental, es el proceso en el cual el esmalte dental (la capa externa y protectora del diente) se desgasta debido a la fricción, el roce o el desgaste mecánico.
Puede producirse por rechinar los dientes de forma involuntaria, hábitos alimentarios, cepillado incorrecto o excesivo y morder objetos duros. Suele causar sensibilidad dental, cambios en la apariencia y forma de los dientes, y aumentar el riesgo de caries.
En el caso de las fracturas dentales son grietas o roturas en la estructura dental que pueden variar en severidad. Ocasionan afectación el esmalte, la dentina (la capa interna del diente) e incluso llega hasta la pulpa (el tejido interno que contiene nervios y vasos sanguíneos). Generan dolor, sensibilidad, dificultad para masticar y problemas estéticos.
La pérdida de dientes, también conocida como edentulismo, se refiere a la condición en la que uno o más dientes están ausentes en la boca. Puede ser parcial, afectando sólo algunos dientes, o completa, cuando se han caído todos los dientes en una arcada dental (superior o inferior) o en ambas.
Algunas de las causas por las que puede ocurrir son las caries no tratadas, traumatismos, enfermedades periodontales y factores genéticos. Además, compromete la función masticatoria y conlleva a la pérdida de hueso en la mandíbula o maxilar, esto afecta la estructura facial.
La enfermedad periodontal, es una afección inflamatoria crónica que afecta los tejidos que rodean y sostienen los dientes, incluyendo las encías, el hueso alveolar y el ligamento periodontal. Esta enfermedad es una de las principales causas de pérdida de dientes en adultos y puede tener efectos significativos en la salud bucal y general.
Normalmente, se desarrolla en diferentes etapas que incluyen la gingivitis, periodontitis y periodontitis avanzada. Algunas de las causas por las que se producen son la acumulación de placa bacteriana y sarro en los dientes y encías, factores genéticos, fumar, mala higiene oral, diabetes, cambios hormonales (como durante el embarazo) y otros aspectos médicos.
Ahora que hemos visto en detalle cuáles son esos problemas que podrían tratarse con un tratamiento de rehabilitación oral, queremos mostrarte precisamente los procedimientos más comunes que suelen ser empleados en esta especialidad:
Las carillas dentales son finas láminas de porcelana o resina compuesta que se adhieren a la parte frontal de los dientes. Son ideales para corregir problemas de forma, color y tamaño, proporcionando una mejora estética notable con una intervención mínimamente invasiva.
Los implantes dentales son una solución perdurable para reemplazar dientes ausentes. Consisten en un dispositivo de titanio que se inserta en el hueso maxilar y sirve como base para una corona dental. Estos tienen la capacidad de restablecer la función y apariencia de los dientes naturales de manera excepcional.
Las coronas dentales son cubiertas protectoras que se colocan sobre dientes dañados o debilitados. Mientras que los puentes dentales se usan para reemplazar una o más piezas dentales carentes al unir dientes adyacentes. Ambos procedimientos reparan la función masticatoria y el aspecto de los dientes.
Los cuidados posteriores a la rehabilitación oral son indispensables para garantizar que los resultados obtenidos perduren en el tiempo y que tu nueva sonrisa se mantenga en óptimas condiciones. Aquí tienes algunos consejos que debes tomar en cuenta:
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La rehabilitación oral es adecuada para personas con problemas dentales que afectan la estética y función, como malposición, pérdida de dientes, entre otros. Una evaluación con un profesional determinará la elegibilidad.
La duración varía según el caso. Algunos procedimientos como las carillas pueden ser rápidos, mientras que la rehabilitación más completa puede llevar meses, especialmente cuando se involucran implantes dentales.
El procedimiento generalmente se realiza con anestesia, por lo que no debería sentir dolor durante la colocación. Puede haber molestias leves después, pero son manejables con analgésicos.
Normalmente, la rehabilitación oral puede clasificarse en unitaria, que consiste en el reemplazo de un solo diente. Parcial, en el que se reemplazan varios dientes y total, que es cuando se reemplaza una arcada completa en el maxilar o en la mandíbula.