Una de las enfermedades más graves que afecta a las encías es la periodontitis, una infección que puede tener consecuencias serias si no se trata adecuadamente.
En este artículo, descubrirás qué es la periodontitis, sus causas, los síntomas que debes identificar, y lo más importante: cómo prevenirla para mantener una sonrisa saludable.
La periodontitis es una infección grave de las encías que afecta al tejido que rodea y sostiene los dientes.
Es una etapa avanzada de la enfermedad de las encías, que comienza como gingivitis (inflamación leve de las encías) y, si no se trata, puede progresar hasta convertirse en una afección más severa.
La periodontitis no solo afecta las encías, sino que también puede dañar el hueso y el ligamento que sostienen los dientes, lo que puede provocar la pérdida de dientes si no se interviene a tiempo.
La gingivitis es la inflamación de las encías, caracterizada por enrojecimiento y sangrado, sin daño a los tejidos de soporte. Mientras que la periodontitis es la progresión de la gingivitis con daño irreversible al hueso y tejidos de soporte del diente.
La principal causa de la periodontitis es la acumulación de placa bacteriana. Sin embargo, existen otros aspectos que pueden aumentar el riesgo de desarrollarla:
Es muy importante reconocer los síntomas de la periodontitis lo antes posible para evitar que la enfermedad progrese. Algunos de los más comunes son:
La gingivitis es la forma más temprana de enfermedad periodontal.
En esta etapa, las encías se inflaman y se enrojecen debido a la acumulación de placa bacteriana en la línea de las encías. Es completamente reversible si se detecta a tiempo y se trata adecuadamente.
Características de la gingivitis:
La gingivitis puede tratarse mediante una limpieza dental profunda y mejorando la higiene bucal en casa (cepillado y uso de hilo dental).
Si la gingivitis no se trata adecuadamente, puede progresar a la periodontitis moderada leve.
En esta etapa, la inflamación de las encías se agrava y puede afectar a los tejidos de soporte de los dientes, como los ligamentos periodontales.
El daño aún es limitado, pero las encías pueden empezar a separarse de los dientes, creando bolsas donde se acumula más placa y sarro.
Características de la periodontitis moderada leve:
Se requiere un raspado y alisado radicular para eliminar la placa y el sarro por debajo de las encías. El tratamiento puede evitar que la enfermedad progrese más.
En la periodontitis avanzada, el daño a los tejidos y huesos de soporte aumenta.
Las bolsas periodontales (huecos entre los dientes y la encía) se agrandan, lo que provoca más pérdida ósea y puede afectar a la estabilidad de los dientes. Los dientes pueden moverse ligeramente, y puede haber más sangrado e inflamación.
Características de la periodontitis avanzada:
Se necesita un tratamiento más especializado, que puede incluir una limpieza más profunda, alisado radicular, procedimientos quirúrgicos como el injerto óseo para regenerar el hueso perdido.
Estos son los principales pasos para diagnosticar la periodontitis:
El odontólogo revisa el estado de las encías para identificar inflamación, sangrado, recesión gingival y movilidad dental. Además, evalúa la acumulación de placa y sarro, así como posibles signos de infección como mal aliento o presencia de pus.
Se utiliza una sonda periodontal para medir la profundidad de las bolsas entre encías y dientes:
Las radiografías permiten detectar pérdida ósea, abscesos y el alcance del daño en los tejidos de soporte. Las radiografías más comunes son las periapicales y las panorámicas.
Aquí te presentamos las mejores prácticas para prevenir la periodontitis:
El tratamiento de la periodontitis tiene como objetivo detener la progresión de la enfermedad, reducir la inflamación y preservar los tejidos de soporte de los dientes.
Las opciones varían según la gravedad del caso:
Este procedimiento no quirúrgico es el primer paso en el tratamiento:
Este tratamiento reduce la inflamación y ayuda a las encías a volver a adherirse al diente.
Cuando la periodontitis ha causado daños severos, puede ser necesaria la intervención quirúrgica. El proceso de esta cirugía es:
Existen otras opciones de tratamiento para controlar las infecciones bacterianas:
Existen algunos mitos sobre la periodontitis que es necesario desmentir para evitar creencias erróneas:
Aunque es más común en adultos mayores, la periodontitis no ocurre únicamente en esta etapa de la vida.
Con una buena higiene bucal y visitas regulares al dentista, se puede evitar a cualquier edad.
La salud de las encías no siempre es visible. La inflamación y el daño inicial pueden ocurrir sin dolor ni cambios evidentes.
Un examen dental es crucial para detectar problemas ocultos.
Aunque no es reversible, la periodontitis puede ser controlada con tratamiento adecuado y cambios en los hábitos de higiene bucal, evitando mayor daño y pérdida dental.
La salud de tus encías es clave para mantener una sonrisa fuerte y saludable. La periodontitis es prevenible y tratable si se detecta a tiempo.
En DentiSalud, te ayudamos a cuidar tu salud bucal con los mejores servicios y consejos personalizados.
Recuerda, una excelente higiene dental y visitas regulares al odontólogo son esenciales para prevenir daños permanentes. ¡Pide tu cita y cuida tu sonrisa!
Puedes tener periodontitis si tienes encías inflamadas, sangrado al cepillarte, mal aliento persistente, sensibilidad dental o movilidad en los dientes. Es esencial consultar a un odontólogo para un diagnóstico preciso.
Depende de la gravedad. Casos leves pueden mejorar en semanas con raspado y alisado radicular, mientras que casos avanzados requieren varios meses de tratamiento y seguimiento.
Aunque es menos común, los niños y adolescentes pueden desarrollar periodontitis, especialmente si tienen predisposición genética o enfermedades sistémicas.
La periodontitis es contagiosa. Las bacterias que la causan pueden transmitirse a través del contacto constante de saliva con una persona que la padezca. Sin embargo, la enfermedad depende más de la higiene bucal y factores genéticos individuales.
Las principales enfermedades de las encías son la gingivitis (inflamación leve de las encías) y la periodontitis (etapa progresiva que afecta encías y tejidos de soporte de los dientes).