En la práctica odontológica, cada vez son más los pacientes que acuden al consultorio queriendo mejorar el aspecto de su sonrisa y su salud oral, pero con intervenciones poco invasivas que alteren sus piezas dentales originales lo más mínimo posible. En DentiSalud entendemos esta dicotomía y es por ello que, de la mano de los avances tecnológicos y de procedimientos que se han logrado en los últimos años, nos preocupamos por ofrecerles a nuestros pacientes las alternativas que cumplan con esta necesidad. Una de ellas son los bordes en resina, una opción estética que ha cobrado popularidad por lograr resultados armoniosos respetando la estructura e integridad natural de los dientes. Conoce a continuación si este procedimiento es lo que buscas y si es para ti.
Los bordes en resina son un tratamiento de restauración que consiste en modificar únicamente la parte incisal de los dientes (el borde cortante de cada pieza), para corregir leves imperfecciones como desgastes o fracturas de los bordes; nivelar la dentadura al corregir irregularidades y desniveles entre los bordes de los dientes (principalmente en incisivos y caninos superiores); y también, incluso, alargar la pieza dental, pues al tratarse de un recubrimiento en material de resina, esta también nos ayuda a modificar tanto la longitud como la forma del diente.
Todo esto lo logran los bordes en resina sin necesidad de usar carillas dentales, así que es un tratamiento que no implica desgaste dental al no realizarse una reducción o tallado sobre los dientes del paciente, permitiendo conservar la integridad de la pieza dental a la vez que se obtienen todos los beneficios estéticos y funcionales que implica restaurar los bordes incisales.
Es, además, un tratamiento económico y accesible, ya que, al tratarse exclusivamente de la restauración de los bordes del diente, se utiliza menos material y se requiere de menos tiempo para el procedimiento que lo que usualmente involucra un recubrimiento completo.
Los bordes en resina son recomendados para pacientes que presentan leves imperfecciones en las áreas incisales de sus dientes, como bordes desgastados, astillados o con fracturas y que desean remediar este problema para obtener una sonrisa más armoniosa, al tiempo que se previene la evolución de estos daños y la aparición de problemas subyacentes como la caries.
Este procedimiento está indicado en pacientes que tienen sus dientes correctamente posicionados y que están cómodos con el color de sus dientes, es decir, pacientes que no requieren de ortodoncia o de un aclaramiento dental. Esto, debido a que los bordes en resina se encargan de hacer únicamente un contorneado dental en los bordes de las piezas y se busca que el color de estos se empareje con el color actual del diente. Si el paciente requiere de un alineamiento dental, se recomiendan otro tipo de tratamientos que sí van a resolver esas necesidades.
Sin embargo, hay algunos casos particulares donde los bordes en resina se pueden aplicar de manera provisional a solicitud del paciente y esto lo determinará el especialista en diseño de sonrisa, quien dirá si es o no posible.
Para determinar si el tratamiento de bordes en resina es el indicado, se requiere de un diagnóstico previo que evalúe el estado del paciente en tres aspectos: estética (dentolabial); funcional (oclusal); y fonético (que permita producir los sonidos y pronunciarlos correctamente).
Una vez se ha comprobado que el paciente es susceptible al tratamiento, se toman fotografías y se realiza una proyección digital para determinar el largo, la simetría y la armonía que se busca lograr en los resultados. Con estos parámetros, se realizan los modelados de restauración para cada borde dental que se va a trabajar.
Antes de proceder con la aplicación de los bordes en resina, usualmente se recomienda una profilaxis dental para asegurarse de que los dientes se encuentran en un estado de limpieza óptimo y así eliminar el sarro o la existencia de placa bacteriana que podría afectar los resultados del tratamiento en el mediano-largo plazo.
Luego de estos pasos, se pasa a la aplicación de los bordes en resina, los cuales primero serán probados con una restauración temporal sin adhesión para comprobar la conformidad tanto del especialista como, principalmente, del paciente en cuanto a los tres aspectos que mencionamos antes (estético, funcional y fonético). Una vez son aprobados, se continúa, finalmente, con la restauración de los bordes con material de resina.
Aunque suene como si fuera un procedimiento largo y que toma mucho tiempo, la verdad es que una vez se ha determinado que el paciente es apto para el tratamiento y se ha realizado el modelado, la aplicación de los bordes se lleva a cabo en una sola sesión, logrando resultados inmediatos.
- No afecta la estructura natural del diente, al no realizar tallado (o muy poco, si es el caso) o reducción dental.
- Ofrece resultados estéticos inmediatos.
- Se ve muy natural, al respetar la pieza dental a la que se adhiere, su forma y color.
- Es rápido, al realizarse el procedimiento en una sola sesión.
- No duele ni causa sensibilidad.
- No requiere anestesia, pues se trabaja solamente sobre la superficie del diente.
- Es económico, especialmente porque implica menos material y tiempo de elaboración y aplicación que otro tipo de tratamientos.
Los bordes en resina son una excelente opción para pacientes que desean pequeños retoques en las imperfecciones de sus bordes incisales; sin embargo, para aquellas personas que no son compatibles con este tratamiento porque presentan un caso más complejo, es necesario valorar otras opciones como la ortodoncia o la colocación de carillas.
Para elegir el tipo de tratamiento que mejor se adapte a tus necesidades específicas, te recomendamos visitar un especialista.